¿Ha llegado el momento del parto?

Marta López

Marta López, educadora infantil

Actualizado el

¡Por fin! Llega el momento de dar a luz y tienes más ganas que nunca de ver a tu bebé. Es normal que te pongas nerviosa y tengáis dudas sobre cómo será y, sobre todo, cuándo hay que ir al hospital.

Cada embarazada y cada parto son diferentes, por lo que no existe una respuesta correcta a esa pregunta, pero si podemos daros una orientación para que te sientas tranquila y preparada.

Si tu proceso de gestación se ha desarrollado con normalidad, tu fecha de parto (FPP) se corresponderá con el día en que cumples 40 semanas desde tu última regla (FUR). Esta fecha es aproximada y, probablemente, tu bebé nacerá en esa semana según la estadística, pero también puede ser antes o después. Según la semana de embarazo en la que se produzca el parto tu bebé:

  • Habrá nacido a término si das a luz entre la semana 37 y la 42. Si lo hace en este periodo no se considera ni que se haya adelantado ni retrasado, es su fecha normal para nacer.
  • Será prematuro si nace entre las semanas 23-24 y 37. Cuanto más se adelante el parto mayor será el grado de inmadurez.
¿Ha llegado el momento del parto? 1

Una vez aclarado el tema de la fecha de parto, es importante saber distinguir las señales que te indicarán que estás a punto de dar a luz. Para que no lo confundas con otras molestias del embarazo, vamos a darte las claves para que sepas cuándo es el momento de acudir al hospital y, sobre todo, te lo tomes con tranquilidad.

Cuáles son los síntomas de parto

Todos los partos constan de dos fases:

  • Latente: puede llegar a durar semanas y sabrás que ha empezado porque notarás algunos cambios y molestias. Eso significa que tu cuerpo se está preparando para dar a luz.
  • Activa: no suele durar más de 12 horas en primerizas o más de 10 en mujeres que ya han sido madres. Es la fase que popularmente se reconoce como el parto.

Veamos con detalle los síntomas de cada una de estas fases.

Fase latente del parto

La fase latente del parto te anunciará que el momento se acerca. No es necesario que acudas al hospital porque no tiene ninguna consecuencia clínica. Estos son algunos de los síntomas:

¿Ha llegado el momento del parto? 2
  • Tripa más baja: cuando se va acercando el momento el bebé va encajando su cabecita en el interior de la pelvis. A algunas embarazadas puede provocarle molestias, pero es algo completamente normal. Esto pasa porque los huesos del pubis se están separando ligeramente para dejar paso al bebé. Al tener la tripa más baja podrás respirar mejor, pero tendrás más ganas de orinar porque hay una mayor presión sobre tu vejiga. No debes confundirlo con contracciones, porque, aunque sea constante solo se localiza en la zona ósea.
  • Flujo vaginal abundante: puede que expulses el tapón mucoso en esta fase. Algunas mujeres ven un “pegote” de flujo de mayor consistencia en el papel tras limpiarte o en sus braguitas, pero también puede que sea más fluido y no te des ni cuenta. Tampoco es motivo para ir al hospital y no te alarmes si va acompañado de un ligero sangrado marrón o rosado, es normal. Quizás algún capilar sanguíneo se haya roto durante los últimos cambios del embarazo. Únicamente, ve a urgencias si la sangre es abundante o constante, porque en ese caso no proviene del cuello, sino de la placenta.
  • Hiperactividad: se conoce como síndrome del nido vacío y es similar al que experimentan el resto de mamíferos. Dos o tres días antes del nacimiento del bebé, algunas embarazadas tiene una gran necesidad de tenerlo todo preparado y eso va acompañado de mucha energía. No intentes frenarlo, es habitual y puede que te haga sentir más tranquila y preparada para la llegada de tu pequeño/a.

Fase activa del parto. ¿Cómo identificarla?

El parto propiamente dicho se suele asociar tradicionalmente al momento en que aparecen las primeras contracciones o la rotura de la bolsa.

Sin embargo, se considera iniciado el parto activo cuando la mujer alcanza los 5 centímetros dilatación. Clínicamente ha quedado demostrado que en ese punto se reducen considerablemente las intervenciones innecesarias. Antes de 2018 esta regla se aplicaba con 3 centímetros de dilatación.

Veamos ahora cómo identificar los signos de la fase activa del parto:

  • Contracciones: las irás sintiendo desde unas semanas antes de ponerte de parto y, además, irán cambiando de intensidad. En la fase activa del parto tendrás aproximadamente una contracción cada 3 minutos.

    Es casi imposible que hayas alcanzado la dilatación adecuada si llevas menos de 2 horas con tres contracciones muy intensas cada diez minutos. Así que quédate tranquila y relájate, una ducha o baño con agua calentita te ayudará a aliviar las molestias.
  • Romper aguas: no todas las embarazadas experimentan la rotura de la bolsa amniótica. Algunos bebés llegan a nacer dentro de la bolsa intacta. Normalmente, sucede en los momentos previos al parto y puede ser por diferentes causas. Por una contracción o el aumento de la presión que ejerce el bebé para salir. Pero puede que la bolsa se rompa sin haberse iniciado las contracciones. No debes confundir el romper aguas con el aumento del flujo vaginal o el tapón mucoso, ni con tener más ganas de orinar.
¿Ha llegado el momento del parto? 3

Al romper aguas quizás acabes completamente empapada, pero en algunas mujeres es algo más sutil con solo una fisura en las membranas por las que el líquido sale poco a poco. Tras romperse la bolsa, lo más habitual es que el parto se produzca en las siguientes 48 horas, y si no es así habrá que provocarlo, ya que el bebé queda desprotegido frente a las infecciones. Si el líquido es amarillo o verdoso, debes acudir rápido al hospital, pero si es claro te da tiempo a ducharte con calma, cambiarte la ropa y coger todo lo que necesites para ti y el bebé.

Cuándo debes acudir al hospital

¿Ha llegado el momento del parto? 4

Si llevas dos horas con contracciones regulares e intensas, es el momento.

Ten en cuenta la distancia que tienes que recorrer y el tráfico, por si tienes que salir un poco antes.

Si han pasado más de 48 horas desde que rompiste aguas y todavía no se ha desencadenado el parto, debes acudir a urgencias para que los médicos evalúen tu situación.

Igualmente, tienes que ir al hospital si al expulsar el tapón mucoso se produce un sangrado abundante y prolongado. También si el líquido que sale al romperse la bolsa es de un color amarillo intenso o verdoso.

Síntomas antes de la semana 37. Qué hacer

Los embarazos múltiples por reproducción asistida y que las mujeres son madres cada vez más tarde son dos factores de riesgo que han contribuido al aumento de la prematuridad en nuestro país. Estamos hablando de un 36%, es decir, casi 1 de cada 10 recién nacidos es prematuro.

Como hemos comentado al principio de este post, se consideran prematuros todos aquellos bebés que han nacido entre las semanas 23-24 y 37. Son, por tanto, inmaduros al no haber completado el tiempo necesario en la tripa de su mamá para que todos sus órganos se formen plenamente y estén listos para funcionar solitos.

Por ello, si todavía no has alcanzado la semana 37 y tienes contracciones, acude inmediatamente al hospital, aunque no sean constantes.

Si rompes aguas y tu embarazo no ha llegado a término, esto es, que no estás entre la semana 37 y la 40, también es necesario que vayas a urgencias porque puedes necesitar tratamiento con antibióticos intravenosos e, incluso, quedarte ingresada en el centro.

La parte más positiva es que las técnicas para partos de bebés prematuros también han evolucionado. Si te ocurre, intenta estar tranquila y confiar en los médicos y el personal sanitario porque están perfectamente preparados para abordar estos casos de riesgo.

Si vas antes de tiempo al hospital, ¿qué ocurre?

¡Nada, qué va a pasar! No eres la primera ni la última que acude al hospital por una falsa alarma.

Si estás dolorida y te mandan a casa no te agobies, simplemente los médicos hacen su trabajo. No es recomendable ingresar por parto antes del inicio de la fase activa, es decir, si no has llegado a los 5 centímetros de dilatación. Hacerlo antes puede suponer que acaben practicándote una cesárea o el uso de oxitocina. Y no queremos eso, si se puede evitar.

Aunque parezca increíble, recuerda que tu cuerpo está perfectamente preparado para lo que va a pasar. Y, por suerte, estarás en buenas manos para que todo vaya sobre ruedas.

Ten paciencia porque el parto no va ser como llegar y besar el santo. Tu propio organismo te irá dando pistas para que entiendas que uno de los momentos más especiales de tu vida está a punto de suceder.

Va a ser duro, no te vamos a engañar, pero merece la pena.

¿Ha llegado el momento del parto? 5

Preguntas frecuentes de nuestros usuarios

¿Cuáles son los dolores de encajamiento?

Cuando la cabeza del bebé presiona sobre la base de la pelvis es porque se está colocando para salir pronto. Puede que sientas punzadas agudas o calambres. También puedes experimentar pérdida de equilibrio, porque tu centro de gravedad ha cambiado.

¿Qué hacer para que el parto sea más fácil?

Hacer deporte adaptado a tus circunstancias puede ayudarte a estar más preparada físicamente para el parto. Es recomendable caminar todos los días a buen ritmo, subir y bajar escaleras, hacer sentadillas y ponerse en cuclillas. Y si te lo pide el cuerpo, baila suavemente balanceando las caderas.

Opinión de Tueducadora y conclusiones

Cuando sabes que ya falta poco la gran duda, seas primeriza o no, es en qué momento hay que salir hacia el hospital. Con este post esperamos haberte enseñado a reconocer algunas señales que pueden ayudarte.

Si todo ha ido bien en el embarazo, a partir de la semana 37 el parto puede ser en cualquier momento y estaría dentro de lo considerado normal.

Ante cualquier señal que te parezca dudosa, lo mejor es que consultes con el médico. Puedes llamar a tu matrona, o si no acudir al hospital. Que no te de vergüenza porque es más habitual de lo que crees.

Y recuerda, si crees que vas de parto al hospital, intenta ir sin esmalte de uñas y sin maquillaje. Tampoco comas nada, por si tiene que aplicarte algún tratamiento. Por lo demás, ve tranquila y dispuesta a vivir una de las mayores experiencias que tendrás jamás.

Marta López

Soy Marta, tu educadora infantil. Mi objetivo es ayudarte a enseñar a los más pequeños desde casa. ¡Lo tengo! He creado un proyecto educativo con el que conseguirás que aprenda y además se entretenga de manera divertida.

¡Comenta lo que quieras!

Tu email no será publicado.