En la semana 27 de embarazo tu bebé ya ocupa casi todo tu útero y, aunque parezca imposible, seguirá creciendo y triplicará su peso en las siguientes semanas.
Ahora mismo mide 37 cm y pesa 875 kg.
Todo mi conocimiento e investigación
Cambios en tu bebé esta semana
Empieza a coordinar mínimamente sus movimientos, va siendo consciente de lo que hace y sus pataditas ya son tan intensas que pueden notarse desde fuera colocando la mano sobre tu tripa. Es un momento increíble, sobre todo para el papá que sentirá por primera vez a su hijo/a. ¡Disfrutadlo!
Ya va teniendo aspecto de recién nacido, pero todavía tiene que ponerse más regordete.
La grasa que acumule ahora bajo su piel es muy importante, porque será lo que le mantenga calentito cuando nazca. Los bebés no regulan bien la temperatura, así que sin esa capa les resultaría muy difícil sobrevivir en el exterior.
Si dieras a luz en esta semana, todavía no podría respirar por sí mismo porque sus pulmones siguen siendo muy inmaduros.
Tus cambios físicos y emocionales
En este momento, seguramente ya te sienta incómoda en cualquier posición porque tu útero ya llega al reborde de tus costillas.
Estas en el tercer trimestre y, si no las sufrías ya, tendrás varias molestias como dolor en la parte baja de la espalda y en la pelvis, calambres en las piernas, hemorroides y venas varicosas.
Otros síntomas frecuentes de la semana 27 de embarazo son estreñimiento, manchas en la piel de la cara (cloasma), estrías, retención de líquidos, ciática, ardores y edemas en las piernas, entre otros.
Algunas embarazadas coinciden en sentirse físicamente mejor durante el segundo trimestre, cuando ya no tienen náuseas o vómitos y todavía no ha aparecido las molestias provocadas por el aumento de peso y el tamaño del útero.
La parte buena es que la mayoría de síntomas desaparecen después del parto.
Consejos para tu bienestar
No dejes de practicar ejercicio, en la medida en que te sea posible.
Por muchas molestias que tengas, debes mantener una vida saludable y procura al menos realizar largos paseos. ¡A tu ritmo!
La época del año también influye. Sabemos que en pleno invierno por el frío o en agosto con el calor no es muy apetecible. Busca las horas del día menos incómodas para ti.
Y otros trucos que puedes seguir para facilitarte el ejercicio son, por ejemplo, utilizar ropa cómoda que no te oprima para favorecer la circulación, usa un calzado adecuado porque puede que tengas los pies hinchados o, si te apetece, apúntate a pilates o yoga para embarazadas.
Exámenes médicos y pruebas
La tos ferina es una enfermedad que puede ser fatal para un recién nacido. Por eso, se aconseja a todas las embarazadas la vacunación, ya que a través de la placenta el bebé estaría recibiendo algunos anticuerpos maternos que le protegen.
La vacuna puedes ponértela en cualquier momento del embarazo, pero hay que tener en cuenta que no es recomendable hacerlo al principio porque el nivel de anticuerpos va disminuyendo y tampoco hacerlo al final porque la mamá tarda un tiempo en fabricar esos anticuerpos. Lo ideal es ponerse la vacuna (dTpa) entre las semanas 27 y 36 de gestación.
Igualmente, tu hijo/a recibirá la vacuna al segundo mes de vida.
Preguntas frecuentes de nuestros usuarios
¿Cuándo empezar con el masaje perineal y en qué consiste?
El masaje perineal es una sencilla técnica que mejora la elasticidad de la zona del perineo y la vagina. Su principal ventaja es que evita desgarros durante el parto.
Lo mejor es que este tipo de masajes lo puedes practicar tú misma o en pareja, lo que os unirá un poco más. Pero también puedes acudir a un fisioterapeuta especializado en suelo pélvico.
Antes de realizar el masaje, lávate las manos y asegúrate tener las uñas cortas y limpias.
Además, hazte con un espejo para identificar bien la zona del perineo, porque puede que no estés familiarizada con esta parte concreta del mismo.
Si se trata de un automasaje, utiliza tu dedo pulgar. Si en cambio lo realiza tu pareja, es aconsejable que lo practique con los dedos índice y corazón. No dudes en usar lubricante o aceite natural para mejorar el cuidado de esta zona delicada.
Opinión de Tu educadora y conclusiones
Llegados a este punto, es normal que también sufras altibajos en tu estado de ánimo. Tranquila, porque es completamente normal y es probable que tienda a empeorar a medida que se acerca la fecha del parto.
Seguirás notando que tu abdomen crece por días, pero recuerda que no debes compararte con otras mamás. Cada forma, cada tamaño, cada mujer, sois únicas.
Tu pecho también está cambiando. Ahora es más grande y puede que tenga una coloración diferente, con un aumento y oscurecimiento de la areola y el pezón. Esto se debe a la preparación de las mamas para la lactancia materna.
Recuerda que tu matrona es la profesional más adecuada y preparada para orientarte en todo lo que necesites en esta nueva etapa.
Si quieres saber que ocurrirá más adelante, consulta todos nuestros artículos sobre el embarazo semana a semana.
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